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jueves, 2 de abril de 2015

Cuando la injusticia se convierte en Ley y ésta en costumbre: La Memoria al servicio de la Justicia. Día 92

Apoyó a Hitler. Luchó contra un pueblo libre. Respaldó la agresiva invasión de un Estado soberano disparando sus armas contra sus legítimos defensores. Conoció los excesos de los nazis en Rusia. Participó voluntariamente de los crímenes de lesa Humanidad cometido por el nazismo en el Este de Europa. Murió exclusivamente como consecuencia de sus propios actos criminales, pero...

Las Fuerzas Armadas españolas, el Ministerio de Defensa y el Gobierno español protagonizan la documentación, búsqueda, estudio y exhumación de su fosa en Rusia y repatriación de sus restos a España, aunque no para organizar un juicio postumo por sus crímenes, si no para homenajearle y rendirle honores. ¡Honores oficiales e institucionales a un cómplice de los nazis!


Apoyaron al legal Estado Republicano. Lucharon contra los traidores armados españoles y contra los invasores nazis, italianos y mercenarios moros. Respaldaron con su ejemplo y su vida los esfuerzos de un Estado soberano por triunfar contra los golpistas armados. Fueron víctimas de los excesos de los franquistas en España y de los nazis en Rusia, en Francia, en Austria y en toda Europa. Fueron apresados, torturados y asesinados por las fieras franquistas y nazis que cometieron con ellos horrendos crímenes de lesa Humanidad. Murieron exclusivamente por defender la Libertad, la Democracia y la Justicia en la redistribución de la propiedad y de los beneficios de su gestión, pero...

Las Fuerzas Armadas españolas, el Ministerio de Defensa y el Gobierno español siempre les han vuelto la espalda. Nunca han facilitado y siempre han obstaculizado cualquier trabajo de documentación, búsqueda, estudio y exhumación de sus fosas. Durante décadas, siempre han sido juzgados por los sucesivos gobiernos, medios de comunicación e intelectuales próximos a los vencedores como bárbaros e incivilizados desarrapados. Nunca han recibido el homenaje ni los honores oficiales e institucionales debidos del Estado español y sólo ocasionalmente algún partido ha legislado tímidamente en favor de su reconocimiento. Son sus familiares, ellos solos, los que durante años se han visto obligados a investigar, documentar, solicitar subvenciones cuando las había, encontrar fosas, localizar forenses y arqueólogos, exhumar enterramientos, identificar restos y realizar homenajes. Ellos solos.Y aun restan más de 120.000 por encontrar.



¿Y aún crees que los rencorosos son los republicanos?